Miguel
Ángel Morales (blog
personal) analiza
el momento del PSOE después de haber participado de la VI Jornadas
Socialistas de Valle del Jerte.
Que
nadie piense que estas líneas son triunfalistas, pero sí son
esperanzadoras. La esperanza que tengo yo, que nos dieron Eduardo
Madina, Guillermo Fernández Vara y sobre
todo la gente que nos acompañó en un día
extraordinario, en las VI Jornadas de Socialismo de Valle del
Jerte en Navaconcejo.
Un
día en el que los y las socialistas sentimos cómo la frase
de Eduardo Madina, aquella de la esperanza
vence al miedo, nos caló en lo más profundo, porque es una
afirmación de alguien que supo vencer al miedo y al
dolor desde la fortaleza, la esperanza y las convicciones.
Guillermo
Fernández Vara abrió su corazón de par en par a la gente
y expresó toda su voluntad y decisión para reconvertir el
sufrimiento de la población en soluciones concretas, para
el desempleo, la desatención social, el exilio juvenil y el comercio
en Extremadura.
El PSOE está
en marcha y no tiene más que un objetivo: ganar, ganar y
ganar para la gente. Ganar Europa para
torcer las políticas económicas que traen sufrimiento, exclusión y
xenofobia.
Ganar Municipales
y Autonómicas para que Extremadura y la provincia de
Cáceres vuelvan a ser un ejemplo en sanidad y desarrollo sostenible,
para que nuestra gente no se exilie y para dar argumentos y razones.
Para que crean de nuevo en esta región.
Ganar
las Generales para rehacernos de las ruinas en las
que Rajoy, Wert, Gallardón, Mato, Bárcenas y la Gürtel nos están
dejando y dar un paso adelante con la convicción de que lo
mejor está por venir.
Sí,
en Navaconcejo sentimos el calor de la gente, pero sobre todo,
la esperanza en el futuro, la fortaleza de un PSOE unido
y con su motor social en marcha. Ya hemos pasado la resaca de la
derrota y estamos en el camino, firmes y seguros, de consolidar
nuestra alternativa social y de mayorías.
El
pasado de quienes sufrieron en silencio la persecución y el
asesinato de sus seres queridos por parte del franquismo,
nos consolida en un presente plagado de injusticias, pero nos
proyecta hacia un futuro en el que la historia nos vuelve a poner en
la obligación de transformar este país.
Estamos,
somos y no vamos a parar hasta
volver a conseguir nuestras metas que son la razón de ser de la
política: la herramienta para solucionar los problemas de la
ciudadanía. No tenemos tiempo para lamentaciones y en todos los
puntos cardinales de la provincia de Cáceres, Extremadura y España,
el cambio se siente, está aquí. Es nuestra obligación dejarnos
la piel por la gente.
-
No hay comentarios:
Publicar un comentario